miércoles, 17 de diciembre de 2014

Sumisa a la moda

De todos es conocido que en el Bdsm hay ciertos elementos que dentro de las sesiones o de reuniones en grupo son bien aceptados, pero que dificilmente los podemos trasladar a nuestra vida cotidiana... Me encanta la moda, y por mi trabajo he de estar al tanto de las tendencias, cosa que se me hacía difícil de combinar con mi parte sumisa, tan importante como la anterior.
Antes esto era un problema, no puedo apartar lo que soy en ningún momento, siento que me traiciono, pero tampoco podía ir a una reunión con unos clientes en corsé... no creo me contratasen, al menos, ellas no jaja. Así que de forma natural fuí mirando la ropa y complementos con otros ojos, y cuál fué mi sorpresa que encontré diversas colecciones que se podían relacionar con el D/s, sin salir de lo normal. Para los demás no tendrían más significado, para mí, estaría reflejando esa parte de mi vida sin renunciar a la moda. Normalmente busco cositas a precios asequibles, ya que son simples adornos, y porque tengo dos hijas, una casa, y una empresa en la que invertir, así que todo muy lowcost jaja. Iba a esperar, pero viene una buena época de compras y regalitos, para que aprovechéis...
Os traigo cositas para gritarle al mundo lo que somos sin que el mundo se dé cuenta ;). 

 MANGO:
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ASOS
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Es mi tienda de ropa online preferida, creo sinceramente que alguno de sus diseñadores conocen el Bdsm al dedillo, ahora veréis por qué:


  Este reloj se lo regalé el año pasado a mi Amo y Él a mí ese cinturón, es mi preferido!! Ya no están disponibles, pero hay otras cositas muy interesantes, os invito a investigar un poquito en la web, sobretodo en la parte de cinturones, me tienen todos enamorada jaja







Bueno, eso es todo por esta vez, me ha gustado esto de enseñaros otra parte de mí, así que repetiré ;)
Espero que os haya gustado este post un poco distinto a lo habitual y que os animéis a ir mirando cada detalle de la vida con ojillos perversos.



lunes, 15 de diciembre de 2014

Se avecinan buenos cambios


¡El tiempo pasa volando! Estamos ya cerrando el 2014 y aún no puedo creerme todo lo que me ha pasado, ha sido un año intenso en todos los aspectos, y su final me está trayendo solo un adelanto de lo que va a ser el 2015, estoy alucinada. Muchos de los cambios han sido a nivel profesional, se han movido cosas en mi cabeza y una de las máximas que he asumido es que quiero ser lo más profesional y entregada posible en todos los aspectos de mi vida, ¿Será difícil? Sí, mucho. No lo conseguiré a la primera, pero estoy acostumbrada a luchar y a disfrutar del camino.

 Por qué nos suelta este rollo, pensaréis, os lo suelto porque este blog también es uno de mis proyectos, y aunque no escriba con asiduidad no es que lo tenga a abandonado, de hecho tengo varios post en reserva, es que este blog es tan especial para mí, que me ví en la obligación de modificarlo y hacer que avanzara conmigo. Pronto, espero que en estas semanas, os presentaré al nuevo, hecho con todo el cariño para que os quedéis el máximo rato posible conmigo, yo lo veo como cuando vienen amigos a casa, quiero que esté todo perfecto, para que el tiempo se les pase volando, incluso hasta el punto de quedarse a dormir, creo que les gustan más mis desyunos que las cenas jaja.

Quizá esperábais una entrada con más perversión, pero no os preocupéis que pronto volveré a la carga, ya sabéis que tengo la mente llena de guarrerías varias y no que no dudo en compartirlas jaja

viernes, 17 de octubre de 2014

Tierno sádico


La contemplaba tumbada en la cama, su pecho desnudo subía y bajaba acelerado, sabía que observarla la ponía nerviosa, le encantaba tener ese control sin ni siquiera tocarla. El verla expectante y un poco asustada le provocaba ternura en su cabeza y excitación en la entrepierna. Se tumbó junto a ella, se acercó a su cuello y respiró profundo, tratando de robar todo el aroma de su piel, ella se encogió un poco, pasó la lengua y se lanzó a morderla con toda la pasión que pudo. Era suya, podía hacer lo que quisiera con aquel cuerpecito temblón. Apretó su carne con las manos, la pellizcó por los muslos, los brazos, la barriga... ella se quejaba, sus pequeños quejidos le ponían la polla aun más dura, se lanzó a lamer sus pezones, quiso hacer su magia, transformó el dolor aislado en excitación, nostó como ella se mojaba, como los lamentos ahora eran gemidos, y todo se aceleró, los pellizcos se mezclaban con besos apasionados y muy húmedos, los bocados marcaban su piel mientras sus caricias la hacían estremecer. Comenzó a hacerle un dedo salvaje, de esos que sabía que la volvían loca, ella se retorcia de placer, mientras alternaba bocados con susurros al oído. Qué cosas le provocaba aquella mujer, por un lado la quería con toda su alma, estaba dispuesto a todo por protegerla de cualquier peligro o daño, pero, por otro lado, le despertaba un instinto animal en él, veía su carne y quería morderla hasta hacerla sangrar, quería follarla como una bestia y destrozar su pequeña cavidad. Ya daban igual las lógicas, ella estaba loca de excitación y su miembro estaba a punto de explotar. La puso a cuatro patas, frente al espejo, muy despacio pero sin parar le fue penetrando el culo, ella suplicaba que parara un poco, pero él la calmaba con una dulzura que nada tenía que ver con la acción de su cuerpo, quería ver la entrega en ella, quería ver cómo sufría por el placer de su Amo. Miraba la escena en el espejo, la veía como una perrita con los ojos llorosos, una perrita que lo ponía muy cachondo, se veía grande y poderoso tras ella. Comenzó a acelerar el ritmos mientras con la mano acariciaba su clítoris, los lamentos se combinaron con gemidos de placer, y la excitación pudo con él, se corrió dentro de ella, el placer fue tal que le supo a dolor. Agachó la cabeza hasta apoyarla en su espalda, ella encogida y en tensión, con los ojos llorosos pero con la satisfacción que le proporcionaba servirle. Besó su espalda con adoración, le estaba agradecido por haberse entregado, la quería con toda su alma, admiraba lo que era capaz de aguantar por él. Se tumbaron de nuevo, ya relajados y adormilados, empezó a recorrer su cuerpo con el dedo, deteniéndose en cada marca, tenía la carne tan tierna que enseguida se amorataba, le gustaba lamer y besar esas marcas, como quién intenta curar las heridas provocadas. La abrazó con todo el amor del mundo y se durmieron con una sonrisa de satisfacción.
Un rato más tarde, frente al espejo del baño, ella se miraba cada morado que había en su cuerpo, le gustaba verlos, lo recordaban a Él, le recordaban su sumisión. Adoraba a aquel hombre y adoraba lo que le provocaba, no lo quería ni más duro ni más cariñoso, le gustaba tal y como era, un tierno sádico.

miércoles, 1 de octubre de 2014

El regreso de la correa




Hola!! Como os dije, me ha picado el gusanillo de retomar el blog y publicar de una manera más frecuente, lo que aquí escribo es una parte muy íntima y personal de mí, y me he dado cuenta, que cuando dejo de aparecer por aquí, es como si ignorara un poco a Pelusilla. En este tiempo he estado un poco en conflicto con ese Yo, en mi defensa diré que había otras partes a las que debía prestar atención, aunque una vez ajustado todo, hay que volver a las buenas costumbres. Como os dije en la entrada anterior, mi Amo y yo estábamos en un momento de ajuste, yo sentía que algo habíamos perdido, pero no quería decírselo, está en una época de mucho trabajo y no quería estresarlo también en casa. Pero volví a escribir aquí, y volví a hablar por line con mi querida amiga TriAnna, a la que tambien tenía un poco abandonada, y le pido mil disculpas por ello. No sé cómo lo hace, pero siempre consigue hacerme sonreír, da igual que no nos hayamos visto, ella me entiende y tiene las palabras justas que necesito. El caso esque una chispilla saltó en mí, eche de menos una época, y me regañé por haber dejado que las cosas buenas de la misma se extinguieran porque, para variar, la culpa era mía. Al día siguiente estaba tristona, y mi Amo me insistió en que se lo contara. Me escuchó atentamente, paciente y sin enfadarse, tras mis divagaciones y lloriqueos, dijo tranquilo: "Ya sé lo que te pasa, hace mucho tiempo que no te azoto". Era cierto, en estos meses mi estres había aumentado, mi tiempo era limitado, al llegar la noche estaba agotada, y Él me había dejado un poco de espacio, no quería castigarme en esas circunstancias, Él me quiere y por ello, me va pasando castigos, no por faltas graves por suepuesto, pero en Su afán de cuidarme y protegerme me daba un poco más de margen.

LLegó la noche, terminamos de ver una serie y nos disponíamos a subir a a cama, yo no quería, solo imaginarme el dolor hacía que me paralizara, además hacía mucho que no me castigaba con correa, ultimamente me castigaba con la fusta o con una cañilla, lo que provoca un dolor agudo e insoportable, pero en zonas mas localizadas, a pequeña escala. No sé cómo explicarlo, no es que pueda tolerar mejor esos instrumentos, pero nada ha desvancado aún a la correa. Quizá sea algo más bien emcional, la correa fue el primer dolor real que sentí, y he vivído castigos muy angustiosos con ella, quizá ya esté predispuesta a lo horrible que va a ser. Me desnudó y me puso a cuatro patas encima de la cama. Me cubrió por detrás para poder susurrarme al oído "la mirada al frente, no bajes la mirada" puede parecer una tontería, pero ese gesto hace el castigo más duro, cuando agacho la cabeza cierro los ojos y me abstraigo, me encierro en mi cabeza e intento relajarme, pero con los ojos abiertos y la cabeza alta las sensaciones son más vivas y directas, no puedo eliminar nada del castigo, no sé si alguien mas lo ha notado. Lo escuché en el vestidor, y ese sonido que tanto odio apareció, el tintineo de la correa al cogerla... Fueron diez azotes, de esos que primero son un golpe, luego alfilerillos clavándose y por ultimo un ardor que parece no acabar. Tras el último se tumbó a mi lado y me acurrucó, la sensación de estar en paz me invadió, pra mí un castigo así suele ser algo revelador, quizá alguien de los que me lee no lo entienda, pero tras poner los sentidos en alerta, tras solo pensar en el dolor, en nada más, es como si la niebla de mis pensamientos se disipara y veo todo mucho más claro. Vi mi soberbia, vi el daño que me hace los halagos de los demás, epiezas a adquirir gestos altivos, y no pasa nada, no tengo que ser sumisa con todo el mundo ni en cualquier situción, pero nunca debo olvidr a quién pertenezco, y cual es mi posición en mi relación, no puedo olvidar ue es lo que me hace feliz, porque si lo hago es cuando empiezan las tristezas y angustias.

Le pedí perdón una y otra vez, pedí perdón por no saber valorar que tengo un Amo que me cuida, por ser una niña caprichosa a la que le das la mano y se toma el brazo, le pedí perdón por hablar con hombres sin ningún pudor, y por sentirme halagada por sus miradas y comentarios... "No te preocupes tesoro, ya sé que tienes ese fallo, que te has olvidado de tu sitio, te lo recordaré cada noche hasta que vuelvas a asumirlo, verás que bien te va a venir la correa estos días". Para terminar hicimos el amor, y como es costumbre en estas ocasiones especiales en las que el ajuste es patetente, fue profundo, gustoso, de esas veces que no quieres que llegue el orgasmo porque te gustaría estar así toda la noche... 

Y ahora ando ilusionada y excitada todo el día, pienso en Él constantemente, evito hablar con hombres y estoy deseando que llegue el momento de estar a Su lado, que me abrace y olerlo. Ese es el extraño estado que provoca en mí saber que voy a ser castigada, me hace estar feliz mientras temo el momento de que llegue.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Un año ya...

Hola a tod@s!! No sé si alguien aún me lee, pero por si acaso seguiré escribiendo. Pido perdón por tener este blog algo abandonado, pero es que al fin me decidí a montar mi empresa de organización de eventos y eso conlleva mucha dedicación. Aprovecho para ofertarme por si alguien está pensando en casarse jaja.

Hoy estaba escribiendo en mis otras redes sociales, celebrando mi aniversario de boda con mi Amo, y acabo de caer en que ¡ También es mi anieversario con este blog! De verdad que parece un siglo que comencé con mi cuenta en Twitter (la que echo mucho de menos, guardadme el secreto jaja) y que inicié este blog. En este año han pasado muchas cosas, buenas y un poco regulares, aunque el resultado de todas ellas es muy positivo. En mi relaciónn con Él todo se ha ido ajustando de manera natural, ahora siento que estamos más tranquilos, sin condicionantes del tipo "ser el mejor Amo, o la mejor sumisa". Simplemente somos nosotros con nuestra vida.

He de reconocer que el hecho de comenzar en el mundo laboral, ha marcado un poco nuestra relación, antes tenía más tiempo físico y mental para dedicarlo a nuestra relación D/s. Creo que aún buscamos la manera de encajar ciertas situaciones que antes no se daban, como el tener que ir a más actos, tener que hablar con más hombres, estar menos tiempo en casa... Aunque creo que será divertido averiguar cómo lo solucionamos, es normal que la vida y las circunstancias cambien, y también lo es que una relación, tanto normal como D/s, vaya evolucionando y transformándose, sino ¡Qué aburrido sería todo!

Bueno, muchas gracias a todos los que me habéis leído y a los que me leen, voy a intentar retomar un poco el escribir aquí, aunque mi cabeza está gestando proyectos interesantes respecto a esta parte de mi vida, espero poder contaros algo pronto!!


viernes, 27 de junio de 2014

10 años de amor y sexo



Mañana 28 de Junio es un día muy especial, hace 10 años que mi Amo y yo decidimos "intentar" algo juntos, y miradnos, aquí seguimos. Fué un día caluroso, él me esperaba en un banco del parque. Yo no sabía que lo iba a ver, pero era de esos días que te levantas radiante y que vas con el guapo subido, parece que mi insconciente ya sabía algo... jaja. Yo tenía 17 años y Él 20, creo que los nervios nos comían a los dos, desde el día que lo había conocido, algo por dentro me decía que era el hombre ideal para mí, que sería el hombre de mi vida, puede que no os lo creáis, pero es cierto. Y mi intución no me falló. Éramos muy tímidos, hablamos de muchas cosas, dando rodeos para no afrontar por lo que estábamos allí. Pero inevitablemente acabamos diciendo que nos gustábamos, pusimos las cartas sobre la mesa y mirándonos él me preguntó: "Entonces... ¿Lo intentamos?" Yo asentí y nos quedamos mirando, el momento del beso había llegado... puedo recordar cada detalle de ese momento, los nervios, su olor, el tacto de sus labios finos y frescos rozando los míos, su lengua acariciando la mía... yo no había tenido buenas experiencias con los besos de algunos hombres, y recuerdo que pensé que hasta besando era el hombre perfecto para mí. Eran besos suaves, no un intento continuo y baboso de meterme la lengua hasta la campanilla, sino tiernos, excitantes... me encantó y aún me encantan. Y así comencé una lista de momentos inolvidables a su lado. La primera vez que hicimos el amor en la playa, la primera vez que lloré entre sus brazos, los conciertos en Madrid, nuestras partidas de cartas, el nacimiento de nuestras hijas, con todo lo bueno que ellas nos han traído... Si me posiciono en ese día y me dicen que ese muchacho nervioso, amable, bueno, de sonrisa fresca e inocente hoy sería mi Amo, no me lo creería. Por aquellos días yo tenía mis instintos sumisos aparcados y renegados, era algo que no podría conseguir, por lo que prefería no fantasear con ello, si hubiera sabido la de problemas que nos crearía eso, la de discusiones tontas e inútiles, la de reacciones sin sentido que me hubiera ahorrado... pero bueno, el caso es que subestimé a ese chico, y descubrí que ser tierno, bueno y cariñoso, no está reñido con ser un buen Amo.
Hace unos días me castigó, me ató a la pata de la cama y me dijo que se correría en un plato para que lo lamiera como una perrita, era un castigo merecido, pero yo no lo quería, puede que sea de los epores o el peor castigo para mí. Pensé en quitarme el collar y decir que no, pero sabía las consecuencias de aquello, así que no lo hice, me quedé quieta esperando mi castigo, no por miedo, me quedé porque soy Suya sin más, y me gusta serlo, lo quiero y Él me quiere, es todo lo que necesito saber para afrontar un castigo. Si me hubiera quitado el collar hubiera dicho que no, Él no me hubiese pegado, ni azotado, pero yo habría roto ese "algo" que tenemos y que los demás ven pero no saben qué es.
Creo en la vida y en que ella nos trae lo que necesitamos, La primera vez que lo ví creo que supe captar lo que Él tenía dentro de verdad, supe ver que no sólo sería el hombre de mi vida, sino que sería capaz de ser el Amo que yo necesitaba.
Hace también un año que lo llevo tatuado en la piel, un año que sonrío cada vez que me miro la muñeca...
10 años de relación dan para mucho, los nuestros además han sido muy intensos, y tengo muy claro que quiero seguir a Su lado, con todo lo eso conlleva... es que me encanta ser Su Pelusilla.

jueves, 12 de junio de 2014

El collar y el Amo





Yo lloraba a "moco tendido", estaba triste y deprimida, "es que no estoy lo suficientemente delgada, es que no tengo toda la ropa que quisiera, es que tengo cuatro agujeritos de celulitis en el culo, es que no consigo mis metas laborales..." Sí, problemas godísimos (nótese la ironía), y es que he de reconocer que cuando me da la "depresión" me pongo cansina y muy tonta, exagero y mi mente se llena de minicosas que van mal, pero que a mí me parecen lo más grave del mundo. Él estaba en silencio haciendo pesas mientras yo le contaba todas estas cosas. Así estuvimos un rato, yo quejándome y Él en silencio. Cuando terminó me cogió de la mano, y subimos a nuestro cuarto. Yo no sabía muy bien qué hacía, no parecía enfadado, pero tampoco estaba normal, la incertidumbre empezó a ponerme nerviosa mientras subíamos las escaleras hacia el dormitorio. Al llegar me dijo que me desnudara y me pusiera en "Espera" en la cama. Mis peores temores se adueñaron de mí, me iba a caer una buena con el cinturón. Mientras Él buscaba algo en el armario, yo temblaba, estaba triste y deprimida, lo último que quería era que me azotara, pero qué podía hacer, cuando decide hacer una cosa la hace, y mis súplicas o mis intentos de razonar, lo único que hacen es empeorar el resultado. Así que allí me mantenía, lo más serena posible. Pero para mi sorpresa no sacó el cinturon, se acercó con el collar y la correita roja que me compró en Madrid y me los puso. Hacía meses que no me lo ponía, desde nuestra "crisis". Tengo que reconocer que me emocioné, reviví sensaciones que me gustaban, aunque seguía sin saber porqué lo hacía. Tiró de la correa y me bajó al suelo, me dijo que volviera a ponerme en posición de espera, y ató la correa a la pata de la cama. Se puso a la altura de mis ojos, levantándome la barbilla. ""Voy a darme una ducha, mientras, tú te vas a quedar aquí pensando en lo maravillosa que es tu vida, vas a pensar en todas las cosas buenas que te pasan, y vas a reflexionar sobre lo poco que las valoras ¿entendido?" Asentí con la cabeza. Lo escuché meterse en la ducha, oía el agua correr, y yo ahí, en esa situación, sin móvil, ni libros, sin nada que hacer, sin nada en las manos, es una situación en la que rara vez me encuentro. Y efectivamente reflexioné, pensé en la suerte que tengo, en lo buena que es la vida conmigo, en los mil motivos que tengo para sonreír y en lo poco que valoro todo eso, soy una persona tan excesivamente exigente y perfeccionista que en cuanto consigo algo, lo olvido y ya miro en lo próximo que quiero conseguir, pienso sólo en mis fallos olvidando los logros... y sí, también soy caprichosa cabezota... y seguí pensando en todas estas cosas, pero pensándolas de verdad, indagando en el porqué soy así. Un nudo llegó a mi garganta, como cuando era pequeña, un nudo de esos que se te agarran y que no dejan que salga a penas voz. Él salió de la ducha, desnudo se sentó al borde de la cama, yo me agarré a su pierna y rompí a llorar, pero no un llanto como el que había provocado esa situación, sino un llanto profundo y sentido, estaba emocionada, pero ya no estaba triste, estaba agradecida por lo que había hecho ante mi comportamiento, estaba feliz de tenerlo a mi lado, y alucinada por cómo era capaz de saber qué es lo que necesitaba. Tras mis reflexiones estaba contenta por la vida que tenía, pero aún lo estaba más por tenerlo como marido, no creo que nadie hubiese hecho eso por mí, otro hombre se hubiese hartado de mis lloriqueos, otro dominante quizá me hubiese azotado por ser caprichosa, pero pocos hubieran hecho lo que Él hizo conmigo. Cuando ya había llorado un poco abrazada a Su pierna, soltó la correa del collar y me cogió sobre Sus piernas, me abrazó y me secó las lágrimas. Sus manos empezaron a tocarme el pecho y poco a poco nos excitamos juntos. Hicimos el amor, y tuvimos un orgasmo de esos lentos y profundos. Al apagar la luz para dormir, me abrazó y al oído me dijo. "A partir de hoy vas a volver a llamarme Amo, porque eres mía y yo soy tu dueño".

viernes, 23 de mayo de 2014

Ese extraño mundo que son las parejas

Hola! Sé que llevo mucho tiempo sin escribir, pero es que no sabéis a qué niveles de estrés he llegado jajaja. Pero ya estoy de nuevo estable y relativamente tranquila. 
Con el buen tiempo hemos iniciado la temporada de barbacoas en casa, y es que parece que en verano te relacionas más con los amigos y es por esto que puedes observar más cómo cada uno vive su relación de pareja. El Dimingo pasado vinieron dos parejas con las que no teníamos mucha relación pero que poco a poco se van uniendo al grupo de amigos. Yo me comporté como a Él le gusta, llené Su copa y la de Sus amigos con una sonrisa, estuve pendiente de Él, pero no excesivamente, de hecho, dentro de cómo nos comportamos a solas, dentro de nuestro estilo de vida, quizá hasta ía decir que no me porté bien, no fuí lo suficientemente servicial. La barbacoa acabó tarde, nos acostamos agotados sin comentar nada. Al día siguiente Él me comentó lo orgulloso que se ponía cuando los otros hombres le decían la envidia que le tenían, tenía una casa grande y bonita, unas hijas muy buenas y sobretodo una mujer tan atenta, que estaba pendiente de él y no ponía malas caras si le pedía algo. Alucinaban sólo porque cuando a Él se le cna copa, yo corrí a limpiarla y a llenarla de nuevo. 
Esto me dió que pensar, siempre he dicho que yo no soy machista, no pienso que todas las mujeres tengan que ser sumisas, yo soy así porque así me gusta ser, pero ese día no me sentía sumisa, simlemente querúia verlo contento, y más que servirle me movía el cariño. Pienso que en las parejas se olvida a veces que agradar al otro, estar un poco pendiente o cubrir las necesidades, no es que nos estemos degradando, es mostrar el amor a través detalles.
Esas dos parejas me dieron pena, y odio sentir pena hacia alguien. Por un lado las mujeres, una no paraba de decir lo poco que la cuidaba su marido, que le daba igual si ella estaba enferma o no, que ya no le hacía el amor, la otra no paró de tontear descaradamente con uno de los solteros, bailando y buscándolo una y otra vez, y lo poco que habló con su marido fué para negarle cosas, y dejar claro que ella lleva los pantalones en la casa. Pero es que ellos no se quedaban atrás, el primero pasaba realmente de su mujer y el segundo no tenía un ápice de celos, le daba igual lo que ella hiciese con otro. Y es que el cariño y los gestos han de ser mutuos, yo sirvo y me someto a mi marido porque se lo merece, me da a cambio otras cosas, yo estoy iente de Él en un sentido y Él lo está de mí en otro. 
Realmente me da impotencia cuando veo que las personas no nos damos cuenta de que con muy poco se puede conseguir mucho. Quizá si una de ellas le hubiese llevado una copa a su marido y él se lo hubiese agradecido con una palmadita en el culo y un "gracias preciosa", quizá con un gesto tan simple los dos estarían mucho más felices.
Yo no hablo desde una posición de pareja perfecta, elejos de serlo, todos tenemos nuestras cosas... pero creo que lo peor que se puede hacer es abandonar, dejarse llevar por la desidia, pensar que los matrimonios son así, en mi opinión para que algo funcione hay que luchar, y ajustar una y otra vez esas pequeñas piezas que a veces no encajan.

miércoles, 23 de abril de 2014

Divagaciones varias




Me gusta mirar a las personas y ser consciente de lo mucho que ignoramos de ellas, estás con una pareja de amigos, los ves hablando entre ellos y te das cuenta de que hay gestos que nunca verás en sus caras, que ignoras las palabras que se dicen mientras hacen el amor, los fetiches y fantasías que se cuentan o que aún no se han atrevido a compartir. 
Nosotros somos una pareja bastante transparente, o eso creen nuestros amigos, saben que debo obedecer, saben que me azota, que me castiga con una correa, todo esto tiene diferentes reacciones en ellos, a una amiga le crea rechazo, siempre se pica con Él porque es demasiado autoritario, e intenta "defenderme" cosa que no tiene ningún efecto como habréis podido imaginar, no necesito que me defiendan de algo que para mí no es un ataque. Otra amiga, en un juego tonto que inventamos de decir lo que más nos gusta de cada uno de los amigos del grupo, dijo que lo que más le gusta de Él es su mirada, cosa que me llamó especialmente la atención, ya que para mí es lo que mas emociones me provoca, miedo, excitación... A ellos les excita, a unos solo desde fuera, a otros le gustaría participar, otros muestran claramente que me querrían poseer, es esa ironía de que les gusta que me ceda, pero que si fuera suya no dejarían que nadie se acercara. Aunque ellos lo tienen aceptado y es algo con lo que bromean bastante, no tienen ni idea del alcance de nuestra relación, no pueden imaginar nuestras conversaciones, nuestra forma de actuar, nuestro sexo... aunque Él me ofrezca o juguemos con otras personas, esos juegos no son nada con nosotros a solas. Nunca me verán desnuda sobre la cama, porque la cama es sólo nuestra, no me verán ofreciendo mi culo para que lo azote, ni me verán llorar por el dolor, o por haberlo decepcionado... 
Es muy curioso, que hay cosas que para nosotros son tan naturales y las tienes tan asumidas que no te das cuenta de lo que provocan a los demás. Hubo una situación que me llamó especialmente la atención. Tras una fiesta en nuestra casa, ya sólo quedaban dos de nuestros amigos, un poco achispaillos, para qué negarlo jaja. Estábamos hablando alegremente de cosas picantonas, en un momento, Él se dirigió a mí,  comentando que yo le obedezco y esas cosas, al terminar dijo, si es que eres una guarra. Lo dijo en un tono excitado más bien cariñoso, pero aunque lo hubiera dicho agresivo el efecto hubiera sido el mismo en mí, me hubiera dado igual. Al ver que yo no emitía ninguna emoción ante el comentario, uno de ellos, me dijo, "te acaba de decir guarra, no le vas a decir nada?" a lo que yo contesté "ya lo sé, es que soy una guarra, bueno, Su guarra". A lo que el me dijo admirado "Dios, eres increíble". Creo que las mujeres hemos intentado meternos tanto en nuestro papel de señoritas perfectas, puras e inocentes, que hemos olvidado el placer de la brutalidad, me gusta hacer las guarrerías que Él me pide, así que por definición soy una guarra, pero eso no hace que otras veces sea una señorita educada y recatada, o no quita que me merezca ser tratada como una princesa, simplemente disfruto de la naturalidad en cada momento. Es lo que me gusta de pertenecerle, me hace sentir intenso cada minuto a Su lado, cuando me mima, me abraza y me besa, cuando me proteje como al ser más indefenso, o cuando me azota, me folla, y me abofetea. 
Es algo que siempre tengo presente, sólo tengo esta vida para disfrutarla sin tabues, para llenarla de los placeres que tengo a mi alcance, y no voy a reprimir ni un ápice la sensación que me recorre cuando me dice lo zorra que soy, la sensación que me recorre cuando me siento una zorra.

jueves, 27 de marzo de 2014

El amor y el sexo, mi salvación

Es curioso cómo tus perspectivas van cambiando, cómo descubres que los deseos no son tan sencillos, están llenos de matices. Siempre me gustó la sumisión, siempre la deseé. Cuando la tuve, en un principio todo era maravilloso, andar un camino lleno de fantasías a realizar... pero el tiempo pasó y me volví exigente y automática, pedía y pedía pues notaba que el deseo se iba apagando, las situaciones no me resultaban tan excitantes, Él seguía mojándome, así que lo que sentía por hacia Él no era el problema, el problema estaba en mí. Sentía angustia e impotencia, no podía vivir sin sumisión ni con ella... Pero llegó el terremoto, la vida es tan bondadosa que cuando algo no va bien remueve los cimientos, para que aunque a veces duela, encuentres la pieza que falta. Y entonces el Amo y la sumisa desaparecieron, descubrí que obedecía para ser la mejor sumisa dentro de un mundo, no porque realmente quisiera obedecer, en esos roles hay elección, si eres una sumisa has de obedecer, si no es una contradicción, y ese pensamiento se repetía en mi cabeza, volviéndome en una mujer que sigue protocolos no pasiones...
Los tres primeros días sin nuestros "títulos" fueron duros para mí, aunque me encantan los cambios me cuesta adaptarme. No sabía qué tenía que hacer, estaba perdida, qué eramos ahora, un matrimonio normal no, un Amo y sumisa convencionales tampoco... pero una tarde, cuando creía que el mundo me iba a aplastar, cuando no tenía claro qué iba a ser de mi vida, Él dormía a mi lado, las circunstancias nos estaban agotando, me pregunté si ya había dejado de ser su princesa por la que darlo todo, si ya me había convertido en una mujer de carne y hueso, exigente, intransigente y que lo estaba destrozando poco a poco... que quizá yo había dado por hecho que todo lo que yo ofrezco compensaba todos mis fantasmas, y que había llegado el momento en que ya no le merecía la pena, que el amor no lo es todo, me planteé que el quererse no puede con el desgaste. Pero lo veía durmiendo a mi lado, y mi mente me gritó que no podía vivir sin Él, que si con todo lo que nos queremos, no es suficiente para que una relación funcione, no creo que haya nada que lo haga, sería el gran fracaso de mi vida, y no creo que tuviera éxito con nadie más. Me dí, cuenta de que toda la situación era un error, que lo único que fallaba era mi cabeza, mi comodidad, mi manía de poner palabras donde son mejores los silencios, y tuve claro, que ya no había nada más de lo que hablar, las palabras no demuestran, se tergiversan, duelen y se las lleva el viento. Así que decidí usar un lenguaje que llega mucho más... siempre he defendido que el sexo en una pareja es la materialización de una relación, si el sexo no funciona es un fracaso seguro, aunque luego se digan bonitas palabras de amor. Le agarré la cara, comencé a besarlo con todas las ganas que pude, con la desesperación del miedo a perder lo que más quieres, lo demás vino sólo, los cuerpos se pegaban, las carnes se mordían y pellizcaban y, lo más importante, los sentimientos se ajustaban. Desde entonces todo ha vuelto a tener sentido, vuelvo a estar emocionada y vuelvo a sentir mi sumisión, he descubierto mis matices, no soy sumisa, sólo me gusta estar sometida, no me gusta tener elección, me excita el sentirme atrapada y obligada, no me gusta tener un Amo al que elegí obedecer, me gusta estar dominada por un marido al que tengo la obligación de satisfacer, sin opción. Quien quiera que diga que no son los principios del BDSM, que eso no es sumisión, que no está bien... creo que cualquier cosa que me haga feliz, sin que afecte a terceros, está bien. Ahora a veces obedezco por verlo sonreír, y otras por miedo, sí por miedo, y es que el miedo me hace sentir viva, provoca una reacción en mi cuerpo sin la que no puedo vivir, pero hay otras veces en las que me revelo, porque simplemente no me apetece obedecer, o me despisto, pero ya no me hace sentir mal, admito mi castigo y punto, no tiene más transcendencia, no significa que sea peor sumisa, sencillamente porque ya no lo soy, sólo vivimos el 24/7 a nuestra manera.
En mi opinión, creo que toda la información que hay sobre D/s perjudica, yo era más feliz cuando sólo tenía Historia de O y mi imaginación, tenía mucho más claro qué quería y cómo lo quería. Creo que crear comunidades está bien para conocer gente, no para sentar las bases de cómo se tienen que hacer las cosas.

viernes, 7 de marzo de 2014

Una amiga te llama, una canción suena, la inspiración llega



Hay momentos en los que todo parece estar patas arriba, te das cuenta de que no has hecho nada sin estar condicionada por lo que los demás esperaban, que estás exhausta y agotada de luchar contra lo que te viene de fuera, y da igual que tengas un buen día, algo en tu interior no te deja ser feliz, sonríes y las comisuras de tus labios caen por una melancolía que pesa. Tu sabes que hay una fuerza en tí que lo puede todo, pero las cadenas de tus demonios te atan, eres capaz de pelear con las circunstancias, pero no quieres ni asomarte a lo que hay dentro de ti, no quieres ver los fantasmas que realmente no te dejan brillar... Pero la vida es tu gran aliado, te deja a solas, libre de exigencias ajenas, te ayuda a cerrar lo ojos para que veas que lo que hay dentro no es tan malo, que esos demonios no tienen los tridentes tan grandes, que en cuanto descubras que puedes con cualquier cosa que te propongas, que eres guapa, preciosa, maravillosa aunque no haya quien te lo diga, no lo necesitas, no necesitas la ayuda de nadie para triunfar, para desplegar esas alas que te llevarán a la parte del mundo y de la vida que escojas. 
Todos, absolutamente todos, tenemos demonios en nuestro interior, lo que hay que entender es que no hay que luchar contra ellos, solo enfrentarnos y domarlos, por qué rechazarlos, también forman parte de lo que somos.
Domínalos, quiero ver como triunfas, como te haces grande, más bien, quiero ver como descubres que ya eres grande.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Celos y control

Este es un tema del que me apetecía hablar, pero nunca encontraba el momento. Casualmente ayer twitter estaba lleno de debates al respecto, aclaro que no he participado en ellos porque no lo tengo permitido.

Una noche mi Amo habia salido con Sus amigos a tomar algo, cuando vuelve de esas salidas le gusta follarme, sea la hora que sea. Esa noche me contó que una chica en especial había estado encima de él, decía estar sorprendida de que estuviera casado tan joven, y de que su mujer lo dejara salir... Él con toda naturalidad le contestó, le comentó que éramos una pareja un tanto especial y la invitó a acompañarlo más tarde a casa, que yo estaría encantada de jugar con ella... por supuesto la chica no accedió, lo quería sólo para ella. Mientras me contaba esto, yo le besaba el cuello cachonda, el olfato es un sentido por el que me dejo guiar, y un olor diferente, algo más femenino, llegó a mi nariz. Le pregunté cuando ya estaba subida encima. Su media sonrisa apareció, y continuó con Su historia, contándome cómo había ido con la chica al baño, como la había besado, metido mano... las sensaciones recorrían mi cuerpo, y sobretodo mi mente. Me corrí intensamente y cuando me tumbé exhausta a Su lado, riéndose me contó que la última parte de la experiencia era mentira y me recordó que había empezado a usar la crema para la barba que le regalé, y de ahí el olor, que sólo había jugado un poco conmigo, para ver mis reacciones... me enfadé, me enfadé muchísimo, no por lo que todos pensaréis, me enfadé porque no fuese real, deseaba que hubiese pasado de verdad. 
Toda esta historia es para dejar claro que no soy celosa, al revés, me excita muchísimo que tonteen con mi Amo, tengo una amiga a la que, cuando le digo esto, me dice que es porque no me he visto en una situación real, que en mis fantasías yo creo que es así, pero que si lo viera con otra mujer me encendería y me pondría como una loca. A ella no puedo contarle que sí me he enfrentado a esas situaciones, y que me han excitado más de lo que imaginaba. He visto a mi Amo con mi mejor amiga entre Sus brazos, haciéndole un dedo salvajemente, hablándole al oído como hace conmigo... y de todas las cosas que hemos hecho los tres juntos, esa es la imagen que más me excita. También lo he visto atando a una sumisa a una silla con correas, y ver como le acariciaba el interior del muslo tras apretarle la atadura de esa zona... Y nada de celos, sólo excitación. En nuestra relación, y hablo sólo de la mía, no generalizo, como Su sumisa, no puedo entender la posesión, yo soy la que le pertenezco y si a mi Amo le causa placer pasar un rato con otra mujer, que lo haga, eso no va a desequilibrar los pilares de nuestra vida, lo nuestro es mucho más que sexo. Y si comienza a tener una relación con otra... pues si se enamora de otra mujer, hay poco que yo pueda hacer, si ya no soy la mujer de Su vida es mejor que cada uno siga su camino, por muy doloroso que se me hiciera. No quiero a nadie a mi lado por obligación o porque crea que es lo "correcto" si alguno ya no siente lo mismo, es un error. Así que no voy a estar obsesionada por si se encuentra con Su "mujer ideal", si ella existe, es que yo no lo soy.

¿Y al revés? ¿Es celoso mi Amo? la respuesta es sí, mucho. Ahora el comentario general sería, es un hombre inseguro, es que no confía en tí... creo que debatir el D/s con argumentos y patrones vainillas, es un gran error, primero, si no quisiera control no sería sumisa, y creo que si te sometes a Sus normas es a todas y sin rebatir, es muy fácil cumplir sólo las que nos gustan. ¿Inseguro? Si fuera inseguro, no dejaría que otros hombres me tocaran, ni yo a ellos, no le gustaría cederme... si tuviera miedo de que por una simple conversación lo dejara, el miedo ante una relación sexual con otro sería espantoso. Yo lo veo como una cuestión de control, y no es sólo a través del ordenador, cada noche, antes de dormir me arrodillo en la cama, Él me pregunta con cuántos hombres he hablado ese día, y me abofetea tantas veces como hayan sido. No es una prohibición, no es algo que me impida desarrollar mi vida normal, Él sabe que tengo que hablar con hombres, es inevitable, desde una situación de trabajo como ir a comprar el pan... pero eso no quita que tenga consecuencias, y esas consecuencias hacen que lo tenga presente en cada momento, si echo gasolina, si algún padre del cole me habla... puedo notar las manos de mi Amo apartándome el pelo de la cara y levantándome la barbilla para darme la bofetada mejor. Vuelvo a repetir, esto es mi manera de ver las cosas, otra se estará horrorizando, pero yo he decidido seguir Sus normas, justas o no, vine a obedecer, no hay más. 
Por otro lado, yo soy muy de ponerme en los zapatos del otro, y me imagino como Ama, un papel que se basa en el control absoluto, una imagen que se erige en el poder... por mucho que supiera que mi sumisa no se va a ir con otro, no me gustaría nada que nadie tuviera ni la más mínima esperanza de que así pudiera ser, me enfadaría mucho sólo imaginar que otro piensa que me está pasando por encima, aunque no fuera cierto, no creo que sólo se trate de controlar a una persona, creo que es también controlar situaciones, y esa no querría que se diera. Y en esto hablo con propiedad, siempre he sido una chica simpática y pizpireta, y las mujeres que me conocen pueden dar fe de que lo soy tanto con hombres como con mujeres, cosa que en el instituto me creó muchos problemas y famas que no me correspondían, los que yo trataba como mis amigos, y con los que era cariñosa al igual que con mis amigas, resulta que tenían otro sentimiento hacia mí. En el momento que me lo confesaron y yo no les correspondí, porque tenía claro que no eran nada más, la que quedaba mal era yo, la culpa de sus esperanzas y sensaciones eran mías por ser así, y no les restregaba el culo por la cara vaya, que sólo era simpática, pues nada yo era la calientapollas... yo pagué el pato de sus intenciones, no de las mías. Eso no me volverá a pasar, no sólo por las normas de mi Amo, también por las mías propias. 
Así que si fuera Ama, sí sería celosa y posesiva, cada papel tiene unas características y actitudes diferentes, por eso yo no lo soy, y Él sí.
Bueno después de esto podéis decirme lo que queráis, por supuesto acepto y me encanta saber las visiones de los demás, cada uno busca su propia forma y manera de ser feliz, no intentaré convencer a nadie de nada, al igual que nadie me convencerá a mí.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Mi padre ¿mi origen?

Hoy me he levantado, y he visto la noticia de que Paco de Lucía ha muerto, no voy a hablar de él desde la admiración, ya que toda la vida he renegado de lo que significaba, ahora entenderéis por qué. 
En cuanto lo he sabido me he acordado de mi padre, él es un gran guitarrista, desde muy joven iba a las cuevas del Sacromonte a aprender del arte gitano. Mi padre es un gran admirador de Paco de Lucía, y si hay alguna canción que va con él es Entre dos aguas, por un lado porque recuerdo esas mañanas de Domingo, cuando aún vivía con nosotras, el sol entrando en el salón, incidiendo sobre unos cuarzos que teníamos colgados en la pared que proyectaban el arcoiris en la habitación, y mi padre sacando su guitarra, esa guitarra a la que tanto coraje le tenía yo, y ponerse a tocar esta canción, veo su cara, su gesto, y su sonrisa cuando terminaba de tocar. De pequeña tenía autentica devoción por mi padre, siempre ha sido un hombre guapo, interesante, inteligente, apasionado y con un gran carisma, un espíritu triunfador, que traía a más de una loquita, para mí mi padre lo podía todo, me encantaba ir de su mano, siempre con su traje y oliendo a Adolfo Dominguez. Pero poco a poco vas creciendo y la inocencia infantil se transforma en realidad, y empiezas a darte cuenta de que tu padre te quiere, al igual que quiere a sus ambiciones o deseos, notas que no traduce lo mucho que le importas como a ti te gustaría, no quiero confundir, yo siempre he sido su niñita, me ha sobreprotegido lo que ha podido y más,me ha protegido de todo menos de la idolatría que le tenía, si lo pienso, creo que siempre he odiado tanto las cosas que le gustaban, porque sentía que lo alejaban de mí, les tenía celos. Con once años llegó la época oscura en nuestra relación, cuando mis padres se separaron, lo culpaba una y otra vez, sentía que me había engañado, estaba traicionada y dolida, dónde estaba ese sentimiento que tenía por él, dónde estaba el dios al que adoraba.
 Pero esos tiempos pasaron, ahora soy adulta, y desde hace varios años tenemos un relación maravillosa, cada uno tiene sus cosas, pero sabemos que estamos ahí, y sinceramente puedo decir que quiero a mi padre más que nadie, lo quiero con sus defectos y virtudes, sin intentar cambiarlo, he entendido que ese dios era un hombre, y por tanto lo comprendo sin juzgarlo, él acude a mí para contarme lo que a nadie más se atreve, sabe que yo le daré mi mejor consejo y mi mejor sonrisa.
Sé que esta es su canción, porque creo que representa muy bien el transcurso de su vida, siempre entre dos aguas, el agua de sus pasiones, de lo que le hubiera gustado ser, un guitarrista viajero, dar tumbos por el mundo sólo siendo fiel a su guitarra, manteniendo relaciones intensas y esporádicas con mujeres llenas de placer y aventura, y el agua de lo que le dijeron que tenía que ser, un hombre de negocios inteligente, con una bonita familia perfecta y triunfador. 
A mi padre le tengo que agradecer y reprochar lo que soy, he heredado aspectos de él que son mi virtud y mi cruz, aunque a diferencia de él he sabido determinar lo que soy, y defenderlo, no conformarme con otra cosa. Y digo esto hablando entre otras cosas sobre el BDSM, creo que mi padre siempre ha tenido un dominante dentro, pero no ha sabido sacarlo, o quizá sí, y es por eso que mis padres se separaron, son cosas que a una hija no se le cuentan, quizá esa veneración que le tenía era la propia que se le tiene a un Amo, sin nada sexual de por medio por supuesto, en mi eterna búsqueda del por qué soy sumisa, quizá mi padre sea un pieza clave, mientras escribo recuerdo mi relación con él, sólo quería agradarle y obedecerle, nunca me puso una mano encima, y jamás me regañó con más de tres frases, pero para mí eran más que suficientes para sentir que lo había decepcionado y sentirme avergonzada. Recuerdo que una vez, estando en una casita que teníamos en la playa con toda mi familia, salté una valla, me caí y me rompí la tibia y el peroné, todos corrieron a ver, estaban muy nerviosos, mi padre el primero, quería cogerme y apartarme de la masa de abuelas y tías histéricas, yo me agarré con todas mis fuerzas a mi madre, no sentía ni el dolor en la pierna, lo único que me dolía era haber decepcionado a mi padre, para mí había hecho algo tan grave que no quería quedarme a solas con él, no quería encontrarme con su cara de enfado... ahora que soy sumisa, puedo compararlo con la sensación que me invade cuando mi Amo se enfada conmigo, cuando lo decepciono... al final consiguió meterme dentro de casa, me sentó en el sillón, se puso frente a mí, miró mi pierna tranquilamente, aunque muy preocupado, me miró a la cara y secándome las lágrimas con la mano, me dijo: "¿Chiqui, por qué lo has hecho?". Ningún regaño, nada, sólo preocupación y protección, yo me sentí la peor hija del mundo.

Sí, cada vez tengo más claro que mi padre nació para ser Amo, recuerdo cuando se enfadaba que le decía a mi madre "Cuando me enfade dame la razón, aunque no la tenga, cuando se me pase ese momento te pediré perdón, pero no me contradigas por favor" todo esto igual que conmigo, sin violencia ninguna, a mi madre también la veneraba. Y aún hoy, mi Amo tiene el mejor suegro del mundo, puesto de vez en cuando me suelta uno de sus consejos del tipo "Tú a él dale lo que te pida (refiriéndose al sexo entre otras cosas)"

Pues bueno, todo este rollo, que no tenía pensado soltar, era para decir que me he sentido triste por mi padre, le he mandado un whatsapp y un vídeo de Paco de Lucía. 
Me gusta hacerlo sonreír.

martes, 25 de febrero de 2014

Humillante


En una relación D/s, hay actos evidentemente humillantes, que te insulten, que te abofeteen, que te hagan hablar con una mordaza en la boca... pero a mi personalmente esas cosas me humillan superficialmente, no profundizan. Sin embargo hay otras mucho más simples o tontas que calan en mi interior, y hacen que me sienta verdaderamente humillada. Una de esos gestos es la correa, pero no la de azotar, sino cuando mi Amo me engacha la correita de perra a mi collar y tira de para que lo siga, eso tiene en mí un efecto inquietante, me siento rebajada, despersonalizada, realmente me aleja un poco de mi parte humana. Respecto a Él también me provoca la extraña sensación de que dejo de ser Su princesita, ya que, por muchos azotes, dolor, o por mucho que me esté usando, siempre siento que lo hace venerándome, estableciendo una conexión especial entre los dos, pero la correa me distancia de Él, desvanece por un momento nuestra relación de pareja y me convierte en Su objeto, a Su disposición, para saciar Sus instintos sin reparos, no es que no lo haga siempre, la diferencia radica en que con la correa no siento que tenga el seguro del amor, ese colchón que creo que a veces lo frena un poco.
 Otra cosa que me humilla profundamente, va un poco relacionado con eso, y es cuando me obliga a que me corra restregándome con su pierna. Ayer, después de comer, dijo que nos subiéramos a echar una "siesta", yo me las prometía felices, los polvos de sobremesa son mis favoritos, cuando me metí en la cama desnuda, me abrazó y metió Su muslo entre mis piernas, apretándome el clítoris y al oído me dijo "Te vas a restregar hasta que te corras, en cuanto lo hagas te la meteré fuerte y duro. Sé que podría usarte y punto, pero en el fondo soy un blando, primero dejaré que te corras frotándote con tu Amo, como la perra que eres." Para mí fue muy humillante notar Su pierna llena de mi flujo, moverme mientras Él se estaba quieto, sólo mirándo mi desesperación por tener un orgasmo, ya que de vez en cuando, también susurraba amenzas si no lo conseguía. Me sentía ridícula haciendo esos movimientos animales, gimiendo mientras Él sólo sonreía. Finalmente lo conseguí, y tal como prometió, me penetró en el momento de más sensibilidad, fué intenso y muy placentero.
Esto no es un comentario negativo hacia esos actos, todo lo contrario, esa distancia que a veces surge en determinadas situaciones, me alejan un poco más del marido, y me acercan mucho más al Amo.

sábado, 1 de febrero de 2014

Amigas y ¿Amigas?


Pongo en situación, somos un grupo de seis amigas que nos conocemos desde el cole, dentro de ese grupo está mi mejor amiga, con la que puedo hablar de todo, con la que he "jugado", con la que tengo en común una mente mas abierta... pero las demás son todo lo contrario, cerradas y un poco "mojigatas", en mi opinión. Anoche tuvimos cena en mi casa, ellas saben cuál es mi forma de vida, me gusta ver sus reacciones ante ciertas cosas... no lo puedo evitar, soy una provocadora. Anoche les conté, sólo un poco, de mi escapada a Madrid, enseguida la curiosidad les picó, pude comprobar el prejuicio que hay ante ciertas situaciones, y cuando les pareció "superfuerte" que estuviera desnuda ante otras personas, ya que a ellas les cuesta estarlo ante sus novios, decidí obviar muchas cosas de mi experiencia.Tras contestar a sus preguntas y comentar muy muy por encima el tema de los azotes, decidí que sería la última vez que hablara con ellas de este tema, sus bocas decían que lo respetaban, pero sus caras reflejaban "lo respetamos, respetamos lo enferma mental que eres". Menos mal que a mi lado tenía a mi querida "M" dándome patadas para controlar mi incontinencia verbal, diciéndole a las demás que no está bien cerrarse y negar algo sin haberlo probado... no es que sirviera de mucho, pero se agradece la intención.
Esta mañana me sentía mal, quizá las incomodé, quizá no debería haber contado nada... pero luego he reflexionado, yo no tengo que avergonzarme de nada, son mis amigas y debería poder contarles mis cosas, no intento convencerlas de que sean como yo, solo hablo de mi vida igual que ellas hablan de las suyas, las que no lo hicieron bien son ellas, por prejuiciosas y por hacer sentir mal a una amiga que solo estaba siendo abierta y sincera. 
Lo mejor llega cuando todas dicen de irse, se levantan, se ponen el abrigo y le preguntan a "M", sorprendidas, si es que ella se queda... siento si queda muy patente que necesitamos un ratito a solas para ser amigas de verdad, sin filtro de palabras, sin juzgarnos, contándonos los pensamientos y demás que no nos atrevemos a contar a nadie.
Para este día, y para esas amigas que basan la amistad en "reuniones de niñas monas que toman café", va esta canción Walking in my shoes - Depeche Mode 
Lo mejor es que si se pusieran en mis zapatos... no querrían quitárselos. Irónicamente, anoche no paraban de decirme lo bonitos que eran, y es que duelen, pero son preciosos.

Walking in my shoes (traducida)

Te hablaría de las cosas por las que me han hecho pasar
El dolor al que he estado sometido
Pero hasta el mismo Señor se sonrojaría
Los incontables banquetes arrojados a mis pies
Frutas prohibidas para yo comerlas
Pero creo que tu pulso comenzaría a acelerarse

Ahora no estoy buscando ninguna absolución
Ni perdón por las cosas que hago
Pero antes de que llegues a ninguna conclusión
Intenta caminar en mis zapatos
Intenta caminar en mis zapatos
Tropezarías en mis mismos pasos
Acudirías a las mismas citas a las que yo acudí
Si intentas caminar en mis zapatos
Si intentas caminar en mis zapatos

La moral lo desaprobaría
La decencia lo despreciaría
El chivo expiatorio que el destino hizo de mí
Pero prometo, a mi juez y los jurados
Que mis intenciones no podrían haber sido mas puras
Mi caso es fácil de ver

No estoy buscando una conciencia mas limpia
Ni paz mental después de lo que he pasado
Y antes de que hablemos de cualquier arrepentimiento
Intenta caminar en mis zapatos
Intenta caminar en mis zapatos
Tropezarías en mis mismos pasos
Acudirías a las mismas citas a las que yo acudí
Si intentas caminar en mis zapatos
Si intentas caminar en mis zapatos

Ahora no estoy buscando ninguna absolución
Ni perdón por las cosas que hago
Pero antes de que llegues a ninguna conclusión
Intenta caminar en mis zapatos
Intenta caminar en mis zapatos
Tropezarías en mis mismos pasos
Acudirías a las mismas citas a las que yo acudí
Si intentas caminar en mis zapatos
Si intentas caminar en mis zapatos

miércoles, 29 de enero de 2014

Un año más guapo, un año más sabio

Hoy le toca jugar con velas a una persona a la que quiero con todo mi corazón, y aunque se lo diga en persona, no quería dejar de felicitarlo por aquí, asi que...

Muchas felicidades Amo, espero estar a su lado en todos los cumpleaños que le quedan por vivir y, aunque suene a tópico, siempre se lo digo, aunque Usted ha sido guapo de siempre, cada año lo va siendo más, y sinceramente le digo que... ¡Los 30 le sientan genial! y si no cree a mi boca, meta la mano entre mis piernas ¿Nota lo que provoca en mí con sólo mirarlo? Mi humedad no miente.
Bueno, cierre los ojos, pida un deseo, que conociéndole seguro es picantón jaja y... por favor, por favor, por favor ¡sople ya las velas Amo!


miércoles, 22 de enero de 2014

La música dolía




Él ponía la misma canción cada vez que la castigaba, sonaba fuerte mientras los azotes irritaban sus nalgas, era la banda sonora de sus ratos de cara a la pared, esa canción ocultaba su llanto cuando la correa la golpeaba. Poco a poco se convirtió en un símbolo, si ella cometía una falta durante el día, Él no le decía nada, y por la noche, mientras ella terminaba de lavarse los dientes, se desnudaba para ponerse el pijama o subía las escaleras para irse a la cama, la ponía, ponía esa canción, y ella se encaminaba lenta e inevitablemente hacia su castigo.
Un día, en una cafetería, mientras ella charlaba alegremente con sus amigas, una melodía familiar llegó a su oído, todo dejó de importar, las voces de las personas que allí estaban se volvieron casi imperceptibles, no contestaba a sus amigas que le preguntaban qué le pasaba, todo daba igual, el sonido de la radio se alzó sobre todo lo demás, la letra le erizaba la piel, las notas musicales le golpeaban el cuerpo, la canción le hizo sentir su entrega, le recordó a quién pertenecía, y es que, en aquel sitio, en aquel momento, incluso lejos de Su Amo y de la correa... la música dolía.

martes, 21 de enero de 2014

Nuestra inolvidable escapada

Este fin de semana ha sido increible, iba en el metro a aquel sitio, iba temblando, estaba asustada y muy nerviosa, primero me preocupaba qué me haría mi Amo con todos esos elementos a su alcance, jaulas, cadenas, látigos, cañas... y lo segundo era que después de dos horas haciendo conmigo lo que le diera la gana, comeríamos con un grupo de personas relacionadas con el BDSM, a las que por supuesto no conocíamos, Amos, Amas, sumisas y sumisos... Pero nada más llegar allí y entrar en ese maravilloso sitio, bonito, elegante, todo se pasó, la tranquilidad de saber que no había otro sitio en el mundo en el que quisiera estar, ni otra persona con la que pudiera estar más segura, me invadió. Disfruté, sentí caricias y dolor, el tiempo se pasó volando entre gemidos, amor y azotes. Nos duchamos y llegó la hora de la comida, que se organizaba en el mismo local. No hablaré mucho sobre esto porque prefiero guardarlo para mí, solo diré que me sentí muy cómoda y aceptada, y que allí superé un límite que no me había planteado ni siquiera superar. Ya por la tarde una pareja de Amo y sumisa se ofrecieron a llevarnos al hotel, y nos ivitaron a cenar a su casa. Es una de las mejores cenas en las que he estado, quizá no lean esto nunca, pero me gustaría decir que a parte de que tienen una casa que me conquistó, en la que es fácil estar a gusto, ellos hiceron que nos sintiésemos en confianza y, aunque suene un poco extraño, me hicieron sentir normal, algo muy importante para mí. Para mí estar con ellos fué tremendamente alentador, yo siempre he defendido que el 24/7 es posible, tiene que serlo porque yo no puedo vivir otro tipo se sumisión, aunque a veces te sientes como que luchas a ciegas, sin saber si es sólo una ilusión, pero ver a otra pareja que lo ha conseguido, que se quieren y lo viven, que son todo un ejemplo a seguir, te da aún más fuerza. En la parte que me toca como sumisa, voy a cogerla a ella como modelo de obediencia y entrega, viéndola, mis ganas de superar límites, de aguantar más, de tomarme más en serio mi sumisión han aumentado. La madurez y la constancia son cosas que mi Amo se merece. 
El sábado fué otro maravilloso día, de paseos, de tiendas que nos habían recomendado, en las que se compró alguna cosita, algo más a lo que temer a parte de la correa. Y por la noche el conciertazo, porque no se le puede llamar de otra manera, de Depeche Mode, dos grandes voces, cantando grandes canciones. Y aunque no tocaron la de "Master and servant" , mi favorita, canté y me emocioné mientras mi Amo me abrazaba por detrás, sin palabras... Y después corriendo a una exposión fotográfica, a la que también nos habían invitado, unas fotos preciosas de Dóminas y sumisas, en un local en el que nos volvimos a sentir muy a gusto y acogidos. 
Me dejo mil detalles especiales en este pequeño resumen de esta gran escapada, sobretodo mil sensaciones difíciles de expresar, momentos a solas en el hotel, que me conquistaron.
Pero no quiero terminar esta entrada sin darle las gracias a mi Amo, Depeche Mode - Home , esta canción describe perfectamente mi sentimiento, hace unos años le dije lo que necesitaba, Él me lo dió, me hizo crecer, avanzar, me ha ayudado y me ayuda a superar muchas cosas, y que, cuando estuve preparada, y para que ese sentimiento de que era rara, de que no estaba bien ser así, desapareciera, me llevó a un sitio en el que sentirme como en casa. 
Ya no me avergüenzo, ahora me siento tremendamente orgullosa de lo que soy y de lo que tengo.
Gracias Amo

martes, 14 de enero de 2014

Tres canciones para este momento

Ya estoy de vuelta de Navidad, ha sido una Navidad dura, pero de las mas bonitas que he tenido. Aún estoy saboreando los momentos especiales, disfrutando de mis regalos... esa noche de vinos celebrando mi cumple, metiéndome mano por los callejones, cómo me cuidó cuando los vinos dijeron de hacer efecto... han sido momentos que quedarán por siempre en mi memoria, también he tenido castigos, las bofetadas por ser simpática con un ex delante suya aún me pican, el sabor de su semen bebido de un vaso por saltarme la mamada del jueves se quedó en mi boca... Todas estas cosas juntas han hecho crecer en mi el sentimiento de que, aunque creí que era imposible, cada día lo amo más, no creo que haya una persona en este mundo que sea más para mi que Él. Por esto, y por que correrme anoche en sus dedos mágicos me puso romántica, la primera canción que pondré es No puedo vivir sin ti - Coque Maya & Anni B Sweet .
 Y cuando creí que ya volvería la rutina, nos ponemos a organizar nuestra escapada a Madrid, en un principio un viaje de concierto, para ver a uno de nuestros grupos de cabecera, Depeche Mode. Pero el fin de semana ha ido cogiendo otro matiz, Él ha reservado para nosotros un lugar donde podremos ser sólo Amo y sumisa, dónde hay jaulas, y otros elementos donde atarme, azotarme, donde puedo gritar de dolor, y disfrutar de ser Suya. Miles de cosas vienen a mi mente, estoy emocionada, nerviosa, en mis fantasias ya me costaba creer que algún día tendría un Amo, que algún día alguien me dominaría y me querría a partes iguales, pero que realmente sentiría el frío de una cruz en mi piel, que realmente estaría encerrada en una jaula... eso era algo que ni me planteé poder cumplir, no por que no haya sitios para eso, sino porque nunca me creí capaz. Pero a Su lado sí puedo, a Su lado soy fuerte, puedo vencer todos los miedos que me acechan, puedo soportar el dolor si le satisface, puedo quitarme las tonterías de la cabeza y admitir que como dice esta canción, todo lo que me mata me hace sentir tan viva, el dolor en mis nalgas tras un golpe de correa, sus besos tras una bofetada, la punzada en mi culo mientras me sodomiza, el hierro de las esposas clavándose en mis muñecas... pertenecerle, obedecer, ser castigada me hace sentir viva y feliz. 
Tengo esa sensación de que este fin de semana marcará nuestras vidas, que nos unirá, que tendremos grandes cosas que callar, grandes secretos que ocultar.
Y para este momento no podía dejar esta canción, primero porque sonará mientras me azota, segundo porque la cantaremos a toda voz cuando la toquen, y por último porque es nuestra canción, porque cuando empezábamos a salir la ponía en el coche, al principio ni me gustaba mucho ni sabía qué grupo la cantaba, aunque más tarde descubriera que tenía mucho que ver conmigo, porque cuando lo veía cantándola en el coche, mientras buscábamos un sitio oculto entre aquellos árboles, no sabía que de verdad todo lo que necesitaba estaba en sus brazos, no sabía que ir a escucharla a un concierto iba a ser tan importante, ni mucho menos que no iría de la mano de mi novio, sino de la mano de mi Amo. 
Estoy en un gran momento, no por las cosas que van a pasar, sino porque me veo capaz de hacerlas, porque empiezo a vislumbrar lo maravilloso que es ser una misma sin restricciones ni tabú, lo maravilloso que es dejarse llevar. Será divertido ver qué cosas me esperan.

viernes, 3 de enero de 2014

Mi cumple

Tal día como hoy, a las 19:20, como me recuerda cada año mi madre, nació una Pelusilla chiquitita chiquitita. ¡Si! ¡Es mi cumple! Si miro atrás, puedo ver un sinfín de recuerdos, objetivamente, no todos son buenos, he pasado por situaciones duras, momentos difíciles, pero me alegro de haberlos vivido, han forjado mi personalidad y madurez, gracias a ellos he llegado a donde estoy ahora. Pero por lo demás he sido una niña feliz, una adolescente alegre y una mujer satisfecha, con defectos que hay que mejorar, por supuesto, pero en ello estamos. Me ha gustado vivir la vida con ilusión y la fantasía siempre ha llenado mi cerebro... cuando era pequeña, me pasaba las horas muertas buscando duendes en el jardín, mirando flor a flor, hoja a hoja, y ya un poco más crecidita imaginaba cómo era mi hombre ideal, y la de cosas que me haría!!! No sé si es por eso, porque no me he limitado a soñar, sino que siempre he tenido la certeza de que esas ensoñaciones se harían realidad, que la vida me ha ido dando lo que he pedido. Y llegando a este día, en el que ya soy una adulta que cumple 27 años, me doy cuenta de que encontré a los duendecillos, dos niñas preciosas, inteligentes y buenas que me llaman mamá y que llenan mi vida de magia, y ese hombre... qué os voy a decir, ese hombre que me quiere y me domina, tal como soñé. 
Haciendo recuento de todo ese pasado, me doy cuenta de que estoy viviendo mi época dorada, no necesito más, me podría quedar tal y como estoy para siempre, bueno, puestos a pedir... más ropa, que de eso nunca tengo suficiente jaja.
Me gusta ser quien soy y me gustan las personas que están a mi alrededor, me demuestran cada día que me quieren, igual que yo los quiero a ellos.
Perdonadme, hoy estoy empalagosa, pero es que en mi cumple me pongo tontorrona.  Esta noche nos vamos de vinos, espero que con eso se me pase jaja.